Envuelta entre cantos y plegarias la Virgen de la Merced llegó al salón principal del Instituto de Previsión y Seguridad de Tucumán, donde reposó a lo largo de una semana, dando inicio a las celebraciones programadas por el mes de la Mujer.
Del acto participaron autoridades del Instituto junto al personal de la institución y afiliados que se encontraban presentes y se plegaron al recibimiento de la Virgen.
La visita se concretó el primer lunes de marzo luego de que la lluvia concediera una tregua matinal tras varios días de precipitaciones, cuando alrededor de media mañana, comenzaron a oírse los estruendos que anunciaban la cercanía de la Virgen a la Institución. De inmediato los cantos y plegarias de todos los presentes se hicieron sentir, entre globos amarillos y blancos que engalanaban el paso de la Imagen, haciendo de su venida una auténtica fiesta.
Tras permanecer toda la semana guardando con su presencia a todo el personal de la Institución, a sus afiliados y público en general que se acercaba hasta esta casa, la imagen de la Virgen Generala del Ejercito Argentino, debió retornar a su morada en la Basílica Nuestra Señora de la Merced donde habita permanentemente.
De la despedida participaron funcionarios del IPSST, junto al personal del instituto y afiliados que se encontraban presentes. Luego de rezar y encomendar sus oraciones a la Madre María, una comisión del departamento de mantenimiento se encargó de trasladar la imagen hasta el vehículo en que finalmente fue llevada hasta su santuario.
