El cáncer cérvico-uterino se trata de un cáncer que se forma en los tejidos del cuello uterino (el órgano que conecta el útero con la vagina). Por lo general, crece lentamente, y puede no tener síntomas. Sin embargo, puede detectarse con un frotis de Papanicolaou común (un procedimiento en el que se raspan células del cuello uterino y se observan bajo un microscopio). La causa del cáncer de cuello uterino es casi siempre por infección con el VPH.
Este tipo de cáncer, causado por el Virus de Papiloma Humano (VPH), se transmite por contacto sexual, y en la mayoría de los casos, el virus desaparece solo, sin causar ninguna manifestación o síntoma en el cuerpo. Sólo en una pequeña proporción de casos, alrededor del 5 por ciento, el virus puede tornarse persistente, pudiendo estas lesiones con el tiempo, convertirse en cáncer.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), este cáncer es el segundo más frecuente entre las mujeres de América Latina y el Caribe y ocupa el cuarto lugar en la región de las Américas. Unas 35.000 mujeres mueren cada año a causa de esta enfermedad y se estima que 83.000 son diagnosticadas anualmente.
Para su prevención, todas las mujeres, particularmente entre los 25 y 64 años de edad, se deben realizar un chequeo anual, en los centros de salud y hospitales de todo el país es gratuito. Se trata de un examen sencillo que no produce dolor, es gratuito en todo el país y sirve para descartar o diagnosticar de forma oportuna esta patología.
Es importante recordar que desde el año 2011 en Argentina, se incorporó al calendario de vacunación, la vacuna contra el VPH para todas las niñas de 11 años nacidas a partir del año 2000 y luego en 2017 se amplío para todos los varones de 11 años nacidos a partir del año 2006, recibiendo la vacuna tanto las niñas como los niños de esa edad.
El esquema completo es de 2 dosis separadas por un intervalo mínimo de 6 meses, No requiere orden médica y es gratis en todos los vacunatorios, hospitales públicos y centros de salud del país.