Con gran participación del personal y autoridades del Instituto de Previsión y Seguridad Social de Tucumán, el pasado martes en el subsuelo de casa central, se llevó a cabo la celebración de la Santa Misa, para pedir por la salud física y espiritual de todos los compañeros que transitan por una enfermedad, por sus familiares y personas cercanas que los acompañan, por todos los asistentes y para rogar por el eterno descanso de los compañeros fallecidos.
Con el apoyo de la interventora, contadora Nelly Ganim y organizada por la Comisión de Mujeres del IPSST como parte de las actividades programadas para el “Mes de la Mujer”, la misa fue presidida por el padre Fray Emilio Córdoba, sacerdote de la parroquia de San Pedro Nolasco.
Luego de la lectura del evangelio de Mateo (23, 1-12), y durante su homilía, el padre Emilio invito a los todos los presentes a “servir para acercarnos al amor de Dios Padre”, y agregó, “nuestra dignidad vale la vida de Dios, el nos llama a ser generosos, a ser auténticos y acercar nuestro servicio al hermano como lo anuncia el profeta Isaías en la Primera lectura, cuando nos dice que debemos escuchar la palabra de Dios y tras escuchar esas palabras salir a hacer el bien. Entonces vamos a pedir que podamos dedicarle en esta cuaresma un poco más de tiempo a la escucha de la palabra, para que broten en cada uno de nuestros corazones los buenos gestos, gestos que reflejen la verdadera conversión interior que se produce en lo más profundo de nuestro corazón, que así sea”.
Casi al término de la misa, luego de la eucaristía y antes de la bendición final, se escucho en todo el salón, una hermosa y emotiva versión del Ave María acompañada por guitarras criollas, interpretada por el Dr. Luis Wexler, tenor e integrante del Coro Estable de la Provincia.