Se destaca particularmente el hecho de estar transitando el año del Bicentenario, porque San Martín tuvo un compromiso infatigable con vistas a dar el paso más trascendente de nuestra historia, el ser libres e independientes de España y de toda otra dominación extranjera.
José de San Martín nació un 25 de febrero de 1778 en Yapeyú, localidad de la actual provincia de Corrientes, fue militar profesional y veterano de guerra en tres continentes.
Su bautismo de fuego tuvo lugar en el norte de África, a los 13 años de edad, en 1791, interviniendo además en distintos campos de batalla en Europa durante las guerras napoleónicas.
Su retornó a Buenos Aires ocurrió en 1812 para luchar por la libertad de Sudamérica. Tras diez años de vida pública, lucha y entrega, el gran José de San Marín consiguió asegurar la libertad e independencia de tres países.
Nuestro país lo reconoce como el “padre de la Patria” y “Libertador” además de ser valorado como el principal héroe y prócer del panteón nacional.
José Francisco de San Martín falleció en Boulogne-sur-Mer, Francia, el 17 de agosto de 1850. Fue un militar cuyas campañas fueron decisivas para las independencias de la Argentina, Chile y Perú.