Desde hace décadas nos imponen diversos estereotipos estéticos y comportamientos de riesgo frente a la exposición solar, haciéndonos creer erradamente que el bronceado es sinónimo de belleza, bienestar y aspecto saludable.
Es importante saber que las radiaciones luminosas de origen solar o proveniente de fuentes artificiales de rayos ultravioleta pueden provocar daños graves en los ojos como cataratas, lesiones en la retina, además del envejecimiento prematuro de la piel arrugas, manchas y diferentes tipos de cánceres cutáneos.
Es por eso que la precaución en relación a la exposición solar debe realizarse durante todo el año, no sólo durante el verano, época en la que el riesgo aumenta exponencialmente debido a la intensidad de los rayos solares.
Por todo lo dicho y para que puedan disfrutar del sol y esto no se convierta en un riesgo para vos y toda tu familia, en especial para los niños y adolescentes, es conveniente adoptar algunas precauciones:
- Evitar exponerse al sol entre las 10 horas y las 16 horas.
- Buscar lugares a la sombra.
- Cubrirse con ropas claras, sombreros y anteojos de sol evitando los rayos UV.
- Utilizar protector solar de al menos 20 FPS (Factor de Protección Solar).
- En caso de bebés menores de 1 año evitar completamente su exposición al sol.