La gastroenteritis, es una enfermedad causada por la inflamación del tubo digestivo, debido a una infección viral o bacteriana. Su mayor consecuencia es la deshidratación sobre todo en bebés, niños pequeños, adultos mayores y personas inmunodeprimidas. Suele adquirirse mediante el consumo de agua o alimentos contaminados, pero también puede transmitirse por entrar en contacto con deposiciones y vómito de la persona contagiada. Las bacterias que más usualmente causan gastroenteritis son escherichia coli y salmonella; mientras que los virus más comunes que provocan la enfermedad son el norovirus y el rotavirus, siendo ambos la principal causa de gastroenteritis grave en niños.
Sus principales síntomas incluyen: dolor abdominal, diarrea, náuseas y fiebre. El tratamiento dependerá de la causa de la gastroenteritis, pero lo fundamental es que la persona afectada ingiera líquidos para prevenir la deshidratación. En casos particulares, el médico puede indicar medicación especial o internación para el aporte de líquidos.
El lavado de manos, además del consumo de agua y alimentos seguros son la mejor manera de prevenir la enfermedad. Sin embargo, es importante incorporar una serie de hábitos nuestra vida cotidiana tales como:
- Lavar minuciosamente frutas y verduras que tienen contacto con el suelo y/o que se van a consumir crudas.
- Evitar la contaminación cruzada utilizando diferentes tablas para cortar carnes crudas, verduras y alimentos listos para consumir.
- No consumir productos que tengan entre sus ingredientes huevo crudo.
- Realizar una adecuada cocción de carnes, especialmente preparaciones que incluyen carne picada.
- Consumir únicamente productos lácteos y jugos pasteurizados.